Juan F. Ballesteros no es pequeño, ya no es tan suave y, ni mucho menos, se diría todo de algodón (NB para Generación Z: léase primer capítulo de Platero y yo) Pero le gusta compartir nuevas ideas para hacer de la música una experiencia formidable a la par de ofrecer alternativas profesionales tanto a músicos y cantantes experimentados como abrir oportunidades a los jóvenes talentos (músicos, cantantes, directores y directoras, compositores y compositoras…)

Aunque nació y vivió en Valencia buena parte de su vida, cosas del azar, ahora reside en Ibiza desde donde gestiona diferentes proyectos musicales y formativos. Director de orquesta y coro, pianista, compositor y productor. Comenzó en su ciudad natal y pronto voló (gracias, Ryanair, que me permitiste visitar tantos lugares que no habría podido con mi presupuesto low cost de estudiante) a conquistar nuevas ideas, nuevas formas y nuevas visiones sobre la capacidad que tienen los músicos para crear de forma infinita proyectos que nos llenen de ilusión y que, a la vez y sobre todo, sean útiles para la sociedad.

La voz siempre le ha fascinado (estudio canto como contratenor) y durante años ha trabajado como pianista repertorista, director de coro y formador de directores y directoras de coro. Prueba de ello la puesta en marcha de la primera formación en dirección coral en el ámbito universitario cuando dirigió por primera vez en nuestro país el I Posgrado de esta especialidad den la UIB (Universitat de les Illes Balears). Lo mismo con la dirección de banda (Universitat de València), instrumento colectivo tan arraigado en la cultura y, precisamente, en el universo de la zarzuela.